Videos Liricos y Pelotudos

jueves, noviembre 26, 2009

El gordo es mufa

- ¿Pero vos estás seguro Rami?
- Mirá que podemos perder un amigo
- Si, muchachos, les juro que si, no pegué un ojo en toda la noche, me la pasé haciendo cuentas, atando cabos, no hay otra muchachos, el Gordo es mufa.
El Colo y Maxi se miraron. No podían, o tal vez no querían creer lo que estaban escuchando.
Ramiro había dictaminado algo de lo que no había vuelta, estaba acusando a su amigo del alma, uno de los cuatro fantásticos, como se denominaban ellos, al mismísimo Ariel “El Gordo” Perotti, como mufa, piedra, yeta o como ellos quisieran denominarlo.
Después de mirarse entre ellos lo volvieron a mirar a Ramiro, quien tenía actitud de no retractarse y los miraba como desafiante, seguro de cada palabra que acababa de decir.
- Si quieren se los repaso de nuevo- Dijo Ramiro para buscar el apoyo que necesitaba.
Los otros dos no dijeron nada y con ese silencio vino la aprobación.
El orador tomó un trago de cerveza como para refrescar la gola y comenzó su discurso.
- A ver, se acuerdan aquel partido que perdimos con los del barrio de La Loma que nunca nos habían ganado en su vida? Quién atajó por primera y única vez ese día?
- El Gordo- contestaron Guille y el Colo a dúo.
- Muy bien. Y se acuerdan cuando me compré el Duna? Qué salimos a estrenarlo todos juntos? A quién pasé a buscar último y qué pasó después?
- Fuimos a lo del Gordo y después te comió de atrás un 273- dijo el Colo.
- Sigamos, Vacaciones del 2002 en Mar del Plata, el Gordo se tuvo que quedar cuidar a la vieja que cayó enferma y fuimos nosotros tres, vos Colo te levantaste a la rosarina esa que estaba buenísima y nosotros con Guille salvamos las vacaciones la primer noche en el Casino. Bueno acordate que el Gordo cayó para ver el clásico con los pinchas y además porque quería ver a Faggiani que para él era un refuerzo bárbaro. Qué Pasó? Nos comimos 3 y encima Faggiani hizo debut y despedida.
- Sigamos. Agosto del 2004, amistoso del Lobo contra cerrito de Uruguay, dirigía Ischia y el Gordo cuando terminó el primer tiempo dijo que le encantaba Foronda, qué pasó? A los 2 minutos del segundo tiempo el colombiano se rompió los ligamentos.
- Seamos realistas muchachos, es mufa, tengo más. La vez que organizó su cumpleaños en el club y hubo un apagón en toda la ciudad. Es más si se acuerdan el siempre cuenta que a la final de la Centenario no fue porque estaba de vacaciones en Córdoba y no consiguió entradas. Todo suma muchachos y además si la quieren completar, hagan memoria, cuántas camisetas del Lobo tiene el Gordo?
- Tres- se apuró a contestar Guillermo
- Exacto, y las tres numeradas y con qué números?- inquirió Ramiro y se contestó- la 13, una 17 y una 21. O sea, la yeta, la desgracia y la única que el club en su momento decidió retirar, o sea hipotéticamente un número que no se iba a usar más. No se que más quieren que les diga.
- Y se las remato, dónde vimos el partido contra Rafaela?
- En lo del Gordo!!!- Contestaron los tres
- Ok, tenés razón Rama, pero quien le dice que no vaya a la cancha? – preguntó el Colo.
- Se lo decimos los tres muchachos, para eso somos sus amigos- dijo Ramiro
- Pero no va a mandar a la mierda- Guille
- No, el es un tripero enfermo, como nosotros, lo va a entender- cerró Guille ya convencido.
Lo que venía no era fácil, habían decidido que el Gordo no tenía que ir a la cancha. Pensaron y midieron cada palabra para encararlo, estudiaron cada una de las posibles respuestas del Gordo, desde la comprensión hasta una batalla campal a sopapo limpio.
El domingo se juntaron en lo de Guille y fueron en auto hasta lo del Gordo. Tocaron el timbre y ahí salió Ariel, bien abrigado y encima de todo la camiseta del Lobo, justo la número13, los tres se miraron como no pudiendo creer.
- Y muchachos? Cómo estamos? Con fe?- preguntó el Gordo que desconocía lo que se le venía.
Fue Ramiro quien primero se animó, tomó un aire que le faltaba, tosió un par de veces para aclararse la voz y se largó.
- Mirá Gordo…
A partir de ahí cada palabra fue como una puñalada, los tres se sentían traidores, y el pobre gordo a cada acusación se hacía más chiquito y buscaba con su mirada en el suelo, alguna respuesta que no encontraba.
Diez minutos después, se produjo el silencio. Las cartas estaban echadas.
- Entendés Gordo? Es por el Lobo, el descenso nos mata, nos entierra, no volvemos más. Hacenos la gauchada Ariel, por favor.
El Gordo no dijo más nada. Lentamente hurgó en los bolsillos de sus pantalones, sacó su entrada, se la dio al Colo y dijo.
- Dénsela a alguien que no tenga.
Se dio media vuelta y encaró para adentro de su casa, antes de entrar completamente volvió sobre sus pasos, los miró a sus tres amigos y con un tono tranquilo les dijo.
- Nos vemos en el Pasaje Dardo Rocha después del partido.
El Colo disimuladamente se tocó el huevo izquierdo.
Se dieron cuenta que la cosa no había sido tan difícil como pensaban, igualmente y por las dudas, decidieron quemar la entrada del Gordo.
La cosa no pudo ser mejor, entre lágrimas, abrazos interminables, besos y miradas al cielo, los muchachos creyeron que fueron ellos los que hicieron posible la victoria. Que fueron ellos los que pusieron la cabeza para desviar el centro que le cayó justito a Niell para el tercero. Que fueron ellos los que pusieron el cuerpo para parar la última pelota de Rafaela después del tiro libre y que fueron ellos los que dieron el paso adelante para dejar en off side al rival de la Crema y que ahí pasara todo el peligro. No había cuerpo que los contenga, se abrazaron con todos los que le pasaron por al lado. No querían terminar nunca los festejos, se querían quedar a vivir en la cancha.
- Che, muchachos, el Gordo!!!- Dijo el Colo
- Uy, si, vamos a 7 y 50 que Ariel debe estar ahí esperándonos.
Enfilaron hacia la puerta que al bosque y se confundieron en la caravana. Cantaban, gritaban, aun lloraban.
Ni en sus más íntimos sueños pensaron que ese 12 de julio les iba a quedar grabado de por vida.
Tal vez era esto lo que buscaban desde el día que se hicieron triperos, tal vez no.
Quien sabe si ser tripero es buscar la gloria o simplemente aprender a disfrutar el sufrimiento.
A saber que se puede aunque no se de.
O tal vez ser tripero era eso que ellos habían hecho. Jugar la carta más difícil, para lograr algo que no estaba en planes de nadie.
Era eso, el amor sin condiciones.
Tanto ellos como el Gordo, entendieron, que esta vez, una vez más, el Lobo los necesitaba así, a cada uno desde su lugar, pero ahí al lado, cantando, sufriendo, llorando. Con el corazón en un puño y los dientes apretados.
Y ahí iban ellos, vestidos de azul y blanco, como la ciudad entera, como cada rincón del mundo en donde se encontrara un tripero, todo era albiazul.
Llegaron a 7 y 50 y ahí en el Pasaje los esperaba el Gordo. Con los ojos rojos aun de tanto llorar, los divisó entre la multitud y encaró hacia donde estaban.
Los cuatro se fundieron en un abrazo. Se hicieron uno.
- Gracias Gordo, gracias- le decía el Colo y no paraba de llorar.
Lo que pasaba en 7 y 50 no se podía explicar con palabras.
Una multitud se había juntado a festejar, pero también a enterrar la historia. Miles de almas pateando en el culo a la frustración y sabiéndose vencedores en todos los aspectos posibles.
Enfilaron a las escaleras del Pasaje. El Colo quiso subirse al pasamanos, dio un paso en falso y se cayó al suelo.
- aaayyyy, la puta madre!- exclamó
Los demás se rieron, él quiso pararse, pero se dio cuenta que no podía apoyar la pierna derecha.
- Me parece que me esguincé, sentí el crack en el tobillo
Guille y el Gordo se lo pusieron en los hombros y lo ayudaron a subir.
- Estás bien?- interrogó Ramiro
- Hoy estoy mejor que nunca- dijo el Colo con una sonrisa.
- Che Rama comprate unas cervezas así tomamos algo mientras festejamos- invitó el Gordo.
Ramiro asintió y enfiló para calle 6. Se detuvo en el acto, se dio vuelta, miró a sus amigos y le dijo…
- Che, perdí la billetera… o me la afanaron…
Empezaron a mirar para el suelo, buscando una aguja en el pajar. Guille lo acompañó hasta la plaza como para desandar el camino andado, fueron hasta el auto que había quedado estacionado en 5 y 49 y nada. Volvieron enseguida y sin fortuna, la billetera no aparecía. Igualmente decidieron que nada empañaría los festejos.
- No hay drama muchachos, no tenía mucha guita, lo choto es que tenía el carnet y el registro, pero dejen hoy es día de festejos.
No se querían ir más del centro.
Se encontraron con amigos, ex amigos, conocidos, compañeros de la facu y gente del barrio.
Festejaron hasta que no tuvieron voz.
- Che, vamos a comer una pizza, tengo hambre- dijo el Gordo pasadas las diez de la noche.
- Vamos- aprobó el colo
Ariel lo cargó en su hombro y enfilaron para el auto. Cuando llegaron y el movimiento no era el mismo. Había poca gente en los alrededores.
Una vez que llegaron el cuadro era desalentador, había vidrios rotos al lado de la puerta del conductor y la puerta estaba abierta. Guille chequeó y se dio cuenta que le habían afanado el stereo junto a un par más de cosas de la guantera. Para peor de males, la rueda delantera izquierda, estaba en llanta.
Apoyado en el techo del auto miró a sus amigos.
El Colo, parado en una pata se apoyaba en el hombre del Gordo, su cara denotaba cierto dolor. Ramiro por enésima vez, chequeaba sus bolsillos y miraba para suelo mientras seguía buscando su aguja en el pajar.
Miró el interior del auto, los vidrios, la goma baja.
Levantó nuevamente la mirada y lo vió. Paradito ahí el Gordo como muleta del Colo, era como que no se daba cuenta de nada, con su camiseta número 13 solo esperaba ver como se desarrollarían los acontecimientos.
Guille bajó la cabeza, se dijo algo para si mismo negando con la cabeza.
- Gordo la puta que te parió, te das cuenta que sos mufa?...
Todos, incluido el Gordo, no pudieron evitar reirse.

Mauro Diaz

Había que estar

HABÍA QUE ESTAR
Big Wolf

Una vez por semana, a veces dos, teníamos la necesidad de encontrarnos y disfrutar del olor de los chorizos que iban asándose lentamente. Las caras no eran siempre las mismas, algunos hacía bastante tiempo que no aparecían a cumplir con el viejo rito, pero hoy era distinto, hoy el motivo era otro y había que estar.
En mi caso particular, en parte por cábala, y otro tanto porque ya no son los 70’s y ahora la guita no alcanza para pagar cuota, bono y pasajes, dejé de disfrutar la soledad de un chori o un paty en los jardines del bosque -como dicen mis amigos de la GGG- para ver los partidos con los mismos nervios y la misma pasión frente a mi televisor. Pero hoy había que estar.
¡Los 60’s … los 70’s! Si algo extraño son esos 20 años dorados, donde los códigos eran la Biblia, los pensamientos, revolución y los puños, las armas con las que defendías lo que es de uno, y no sólo el humo de las parrillas se olía por el bosque platense.
En esos años el Lobo comenzó a ser “el Lobo” de la mano del Loco Ciaccia, los Bayo, Rojas, Prado, Gómez Sánchez y, para mí, lobo no nacido en cuna tripera, marcó el comienzo de mi ida a las canchas.
A fines de los 60’s pasar música fue mi modo de vida y expresión y Guilligan era mi apodo, lo que ahora llamaríamos nick. Daba gusto ver cómo muy a pesar suyo, los "chetos" tenían que bailar al ritmo de La Barredora en el boliche de moda y en la cancha.
El dinero, las ambiciones desmedidas, hicieron que se vea frustrado el sueño tripero, y muchos de los que hoy estamos aquí sufrimos una nueva frustración.
Marcelo, mientras levantaba el vaso de vino, me recordaba el equipo del '78 y la alegría que daba ver jugar a Beltrán y tener la valla casi invicta que defendían Vidallé y la dupla central Gutiérrez y Pellegrini, sólo dos goles en contra en medio torneo.
En esos años obtuvimos el bicampeonato 78-79 de básquet, pero en fútbol también sufrimos como hoy. Pobre actuación en el campeonato y un cuadrangular definiendo la permanencia o no en Primera División.
Por eso hoy había que estar.
Y aunque no lo creas, estábamos todos.
Juan José nos explica que su hermano viene después, que estaba preparando todo para festejar su cumpleaños.
Los titulares de los diarios destacaban que serían 90 minutos a toda pasión, como si ellos supieran de lo que estaban hablando, demostrando lo contrario al marcarla limitada en un espacio de tiempo y considerando que la concurrencia sería no multitudinaria ya que remontar un 0-3 era algo casi imposible de concretar, teniendo en cuenta las realidades del equipo.
Por eso había que estar, porque el revertirlo era la dicha, el milagro, la risa incontrolable; y el no hacerlo era el aplauso sostenido al equipo que se iba al descenso y sería como la despedida a un amigo que, sabemos, se le hará difícil regresar, y entonces el abrazo se hace más intenso, más largo, más tierno, queriendo fusionar todos los sentimientos y transmitirlo sin palabras.
Por eso había que estar.
Porque era tiempo de recuerdos, de emociones similares, y juro que cada uno de los presentes era fiel testigo de lo que se había vivido.
El Torugo, mientras ponía un poco de chimichurri al vacío, recordó aquella tarde en Vélez donde el Loco Fierro se trepó a la reja que dividía la platea local de donde estábamos nosotros al ver que la pandilla (¿cómo puede llamarse una barra de fútbol "La Pandilla de Liniers?) iba tomando posiciones con interés de apedrearnos. Cuando lo vieron, torso desnudo y esperándolos, les agarró pánico y huyeron.
Los partidos en la Boca siempre dejaron anécdotas.
Jorge cuenta la vez que el Torugo iba montado en la ventanilla del auto que lo trasladaba por Dock Sud hacia la bombonera. Estaban arreglando el puente y nos desviaron por dentro. A uno de los que iban adelante se le cae la camiseta que llevaba agarrada en el vidrio.
- ¡¡¡ La 5 !!!
- ¡¡¡La del Chaucha Bianco!!!
Abro la puerta y me inclino a recogerla pero Damián me grita:
- ¡Agarrate!
Y da un volantazo que me impide tomar la preciada prenda.
Desde la esquina, alguien con pilchas bosteras tiraba hacia la caravana. El Torugo sale -como lo hacía el Loco Gatti del 404 naranja- y, 22 en mano, repele el ataque, toma la camiseta, le da un beso y corre hasta el auto haciéndola flamear nuevamente desde la ventanilla.
El Vikingo me recuerda otra de la Boca. Noche lluviosa. Día laborable. Ya habíamos cortado las buenas relaciones con la 12 y queríamos mostrar que no nos asustaban.
Me encuentro casi solo en la segunda bandeja que en ese entonces nos daban, ya que llegué para abrir el estadio. Afuera comenzaban a sentirse tiros y gritos. Ya están por salir los equipos y la 22 aún no llega. De repente aparece el Tóxico con el brazo ensangrentado y con un corte profundo. Rompo mi camisa, le hago un vendaje y el muy inconsciente me dice que hubo una encerrona y que se volvía a ayudar. No lo volví a ver hasta hoy.
Ya va siendo la hora.
Nos fuimos acomodando en nuestros lugares de siempre o en donde pudimos acomodarnos.
Por los parlantes suena un tema de Los Redondos y el Negro me grita:
- ¡Vamos a brillar! ¿Te acordás cuando el Indio cantó "me voy corriendo a ver que ha escrito en la pared la hinchada del Lobo"?
Sonreí asintiendo, pero el Dale Loooooooooobo!!! hubiera tapado cualquier intento de respuesta ya que en ese preciso momento sale el equipo y el griterío es tan grande como la fe que teníamos.
Iban corriendo los minutos, se me cruzaron las imágenes del penal de Marchi en el cuadrangular del descenso, el ascenso, la Centenario, el inicio de las copas Nissan contra el Yokahama Marinos del que la empresa automotriz es dueño, los subcampeonatos con el viejo Timoteo y el de Pedro, las copas internacionales en las que participamos y la angustia iba dando paso a la resignación.
El gordo, que estaba junto a la bandera que puso su familia en la ochava de 60, había empezado a treparse al alambrado cuando ya iban 70 minutos.
Aprovechó e ingresó junto con el Pampa y hacía señas para que entráramos y no lo dejáramos solo. En ese momento el Pampa tira un centro y dos manos toman los pies de Capogrosso permitiendo que Alonso marcara el primero.
El arquero visitante miraba al piso buscando explicación sin poder ver qué lo había amarrado como con grilletes de fierro. Entre los yuyos, Marcelo se reía de forma tal que le daba más significado a su apodo de Loco. Su Banda empezó a alentar más todavía recordando eso de las buenas que ya van a venir, pero Teté y el Pampa quedaron fuera por tarjeta roja y ya no faltaba nada.
La hinchada, la más grande, seguía firme alentando aunque con lágrimas en los ojos.
El Chino Zulberti saltó desde la platea al techo del banco de suplentes y sólo Dios y él saben cuáles eran sus intenciones.
En la cancha ya estaban Juan José, el Vikingo, el gordo Montesinos y cientos de viejos hinchas.
Tomaban a Agüero entre varios y lo trasladaban de un lado al otro de la cancha para que rechazara todo intento cremero. Lo mismo hacían con Aued y Rinaudo.
El Negro salta emponchado en la bandera azul y blanca que me vendiera y firmara. Esa con la imagen del Lobo que dice "Con vos adonde vayas" llega al área, ve el centro que ya pasó a Alonso y solo estaba Niell entrando por el segundo palo, pero tan chiquitito que no tendría el salto y la velocidad precisa para conectar esa pelota.
-Serás como mi hija, una …. ¡Paloma Azul!, grita enloquecido, mientras lo toma de los brazos y lo lanza de cabeza hacia el balón, desviándolo hacia la red, dejando al arquero atónito y sin reacción.
Y todo es delirio, llantos, gritos, la avalancha me deja sentado en el tablón.
Por un momento siento nuevamente el olor a madera que recordaba de niño.
Por un momento pienso la misma historia otra vez, las buenas tienen que venir.
El grito de Juan José dirigiéndose a su hermano, me trae a la realidad.
- ¡¡¡Llegaste!!! ¡¡¡Dale, René!!! ¡¡¡Nos falta un tanto para quedarnos en primera!!!
René sonríe. Y casi como queriendo repetir lo que hizo el Negro, toma el corazón de
Franco entre sus manos y le dice:
- Dejame salvar todos estos corazones como hacía antes.
Y Niell, sin entender lo que pasaba, sin comprender de dónde salían sus fuerzas, puso su corazón al servicio del pueblo tripero, le crecieron alas y voló otra vez como paloma azul hacia la deseada victoria.
Nos abrazamos y besamos con los que teníamos al lado. Ya no importaba nada.
René, con una gran sonrisa y su poncho de vicuña, se iba feliz a festejar su cumpleaños junto con su hermano Juan José, y los invitó a todos a ir con él: al Loco Fierro, al Negro José Luis, al gordo que lloraba porque veía a su familia llorar… también alcancé a ver a Carlín, el que se había tirado en paracaídas en aquel clásico.
Eran miles.
Imposible distinguir a todos.
No sé porqué no fui con ellos.
Tal vez porque me abrazaba con Sebas y le susurraba con lo poco que me quedaba de voz:
- Te lo dije, no me lo podía perder.
Había que estar.

martes, noviembre 10, 2009

El Gran Simulador

Opinión

...rón dice lo que todos quieren oír

Daniel Arcucci
De la Redacción de LA NACION

Cuentan los que saben que una de las características políticas de Juan Domingo Perón, sobre todo en sus épocas de exilio en Puerta de Hierro, era decirles siempre a sus interlocutores lo que éstos habían ido a oír.

Si uno repasa las declaraciones de Juan Sebastián ...rón de los últimos tiempos, sobre todo alrededor del seleccionado, se va a encontrar con un mensaje que coincide con lo que la mayoría piensa, o desea.

Después de la angustiosa clasificación para el Mundial, en medio del desborde emocional que brotaba desde el césped del Centenario y antes del famoso exabrupto de Maradona, él dijo aquella frase que no necesitaba ser sacada de contexto para ser cruda y sensata a la vez: "Todo [hay que analizar], desde arriba hasta abajo... Todos y de todo. Yo creo que el análisis va muy por dentro, desde el presidente de la AFA hasta el último jugador de esta eliminatoria" . Y agregó: "En este momento de euforia no hay que esconder las cosas debajo de la alfombra y por eso ahora hay que hacer una profunda autocrítica. Argentina es un grande y no tiene que festejar lo que festejó en Montevideo. Pero es momento de mirar para adelante y pensar en el Mundial" .

Esta misma semana, el día de la presentación de la camiseta que la selección argentina usará en el Mundial de Sudáfrica -y que desde su mismo diseño transmite algo más que una simple cuestión de marketing-, no esquivó un tema delicado de la intimidad del seleccionado cuando se lo plantearon y no usó la dialéctica para ocultar las dificultades: "No es fácil estar en el medio de Maradona y ---ardo, aunque confío en que puedan resolver sus diferencias como dos personas grandes" .

En otro momento de su carrera, seguramente, no se hubiera subido al escenario para compartirlo con Julio Grondona y mostrarse con esa camiseta como quien ya es dueño de ella. Pero así se siente, evidentemente. Y, más que eso, es consciente de que su carrera, ya extraordinaria, le está dando la oportunidad única de un desquite. No hace mucho, en las traumáticas horas que pasaron entre las derrotas contra Brasil y contra Paraguay, se sugirió ( http://www.canchallena.com/1171713-veron-de-la-reivindicacion-al-compromiso ) que si algo le daba autoridad a Verón para hablar con Maradona y marcarle errores -además de lo obvio- eso era su experiencia en frustraciones.

Antes de viajar hacia Madrid, Diego Armando Maradona cruzó la puerta de hierro que sirve de entrada al country de City Bell y se reunió con Juan Sebastián ...rón. Todos coinciden en que fue a escuchar. Ojalá que haya sido así y que ...rón no le haya dicho lo que el DT quería oír, sino lo que el jugador siente de verdad.


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jueves, noviembre 05, 2009

Entre lineas

Las siguientes son las frases más salientes de la conferencia de prensa que este miércoles brindó el Director Técnico de Gimnasia, Leonardo Madelón, luego del entrenamiento.

"Vamos a ir a un estadio que va a estar lleno. Va a haber mucha presión y creo que Aued le va a hacer bien al sector izquierdo. Esperemos que Ormeño esté bien. Vamos a jugar contra un equipo que en su casa demostró que se hace fuerte. Hay que trabajar como el otro día y esperar que no pase nada raro"

"Cardozo hizo buenos partidos pero es una opción más. Casco también hizo buenos partidos. Es bueno el rendimiento de varios chicos pero saben que no se pueden aburguesar"

"Estoy con mucha confianza. Tenemos que empezar a sumar. Esta muy bien el grupo y convencido de que vamos a sumar muchos puntos"

"No tenemos que entrar confiados. Tenemos que ir a trabajar el partido. Como hicimos en Rosario, ser cortos y aprovechar el ancho de la cancha"

"Piatti no podía jugar acá. Yo me di cuenta. Tenía la cabeza comida y no tenía el grado de compromiso que necesitaba el club"

"
Nacho (Piatti) juega muy bien. Medio de enganche se suelta de punta. Juega bien es rápido, pero hay que darle poco espacio"

"Nosotros trabajamos todos los días y hacemos hincapié en que hay que crecer.
No es que Cuevas esté mal. Hay otros jugadores que fueron creciendo. Pipino es un gran jugador, pero ahora otro está mejor. Y los otros van a bajar y él va a tener que estar listo. Pero para mí es un jugador muy importante"

"Lo que dijo el Gato (Sessa) es una caricia. No hacía falta porque
yo sé el compromiso que tenemos las dos partes. Pero estamos bien. En una situación difícil pero estamos bien como grupo y como equipo"

"Cuando venís de muchas derrotas no hay que perder. La de Independiente es una buena cancha para sumar.
A ellos les costó con Chacarita y también con Colón. Se cayeron un poco. Por eso hay que trabajar el partido"

"Marco Pérez es más rápido de lo pensado. Es un chico que no se asusta y que se preparó para ser profesional en un fútbol agresivo como el argentino. Es muy inteligente. Nos va a ser de mucha utilidad"

"
Vargas lo pedimos en julio. Es más, le habíamos dado el okey. Lo queríamos traer pero estaba muy difícil. Pero me interesa, hay que seguirlo"

"No sé cómo está Guillermo (Barros Schelotto). Tengo que interiorizarme bien. Es un hombre importante para Gimnasia.
Pero faltan siete fechas

"Gimnasia tiene que afianzarse no hay alternativa. Y de la mano de la adversidad vamos creciendo"


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miércoles, noviembre 04, 2009

Gran DT Fecha 12

POSICIONES DE LA FECHA 12
 
Posición Puntos Nombre de Usuario Nombre de Equipo Fechas Ganadas
1 90 Mauro Díaz Asoc. At. Mariano Moreno 1
2 89 Osvaldo Sarti BIG WOLF TEAM 3
3 87 Daniel Hugo Paez CHUPITO 2
4 74 Cecilia María Fernández Unidos de Claromecó 0
5 71 patricia bajo PAMPAYGOUXUNSOLOCORAZON 0
6 67 Victor Esteban Caballero Carenys Basurero del Bosque 0
7 67 Martin Raul Garyulo C.A Roque Junior 0
8 65 Ricardo César Pascual ANDATE MADELÓN !!! 0
9 62 gonzalo ruiz EL_NOMBRE_NO_IMPORTA 1
10 61 oscar eduardo sanguinetti gimnasia y esgrima del bosque 1
11 59 Gonzalo Perez Levalle Le Grand Loup 0
12 58 Analia lazo GINASIAAAAAAAA 1
13 50 Noelia Maricel Comesaña Noetripera 0
 
POSICIONES GENERALES a la FECHA 12

Posición Puntos Nombre de Usuario Nombre de Equipo
1 682 Osvaldo Sarti BIG WOLF TEAM
2 650 Daniel Hugo Paez CHUPITO
3 640 Mauro Díaz Asoc. At. Mariano Moreno
4 613 gonzalo ruiz EL_NOMBRE_NO_IMPORTA
5 612 Analia lazo GINASIAAAAAAAA
6 606 oscar eduardo sanguinetti gimnasia y esgrima del bosque
7 592 Cecilia María Fernández Unidos de Claromecó
8 583 Victor Esteban Caballero Carenys Basurero del Bosque
9 553 Martin Raul Garyulo C.A Roque Junior
10 553 Ricardo César Pascual ANDATE MADELÓN !!!
11 522 patricia bajo PAMPAYGOUXUNSOLOCORAZON
12 496 Noelia Maricel Comesaña Noetripera
13 482 Gonzalo Perez Levalle Le Grand Loup

 
 
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